Ahora que estoy más adulto, veo mi vida hacia atrás y tengo que admitir que siempre me fue muy bien en el terreno de las relaciones. Es extraño, porque tenía la autoestima tan baja que siempre sentí que era un loser en este terreno.

La verdad es que a mis 9 años me enamoré apasionadamente por primera vez de una compañera de la escuela. Años más tarde, a los 13, por fin logré estar con ella. A las semanas, yo mismo la dejé porque la encontré muy inmadura. Luego cuando teníamos unos 23, nos reencontramos y lo volvimos a intentar, pero no funcionó.

A los 15, tuve un amor a distancia en otra ciudad, y me las arreglé para trabajar, conseguir el dinero suficiente e ir a verla todos los fines de semana. Duramos unos 4 meses y lo pasamos muy bien, nada mal, porque esto no se quedó en una simple relación de amor por chat.

A los 16, tuve otro amor por internet; esta vez ella vivía en el otro hemisferio del planeta, en el estado de California. Pronto cortamos el juego, cada uno siguió su vida, pero unos 4 años más tarde ella viajó a Chile, nos juntamos y terminamos lo que empezamos...

A los 17, tuve mi primera novia oficial. Duramos un par de años, ella era la inspiración de todas mis canciones, hasta que me rompió el corazón en mil pedazos, pero mientras duró fue muy hermoso.

Luego en la era de los 20s, fui un aventurero y gozador de la vida. Más tarde, también tuve otra novia importante con la que aprendí mucho. De hecho, ella fue mi puente a reconectarme con la espiritualidad, y luego no volví a estar con nadie más.

Entonces sí, en retrospectiva, he experimentado bastante en esto del amor y las relaciones, he vivido de todo un poco.

El celibato como método de purificación y obtención del autodominio

Al otro extremo, en los últimos 6 años he practicado el celibato. No me ha salido perfecto… porque a veces me atormenta pensar: ¿de verdad nunca más voy a volver a tener sexo en mi vida? Y he cometido unos pequeñísimos deslices un par de veces, nada muy trascendental, pero también creo que es parte del camino. Luego he vuelto al estado célibe con más fuerza, cada vez obteniendo un autodominio más poderoso.

Cabe destacar que la práctica del celibato tampoco incluye la masturbación, ni pensamientos sexualizados como imaginar que estás haciendo cosas con alguien. El celibato es una renuncia con todas sus letras. Si no, simplemente te estás reprimiendo, privándote de algo que en realidad sí quieres hacer; no se trata de eso.

Estos años han sido duros, dominar las pasiones inferiores es un trabajo para valientes, pero tremendamente fructífero en aprendizaje. He conseguido una purificación de mis pensamientos y sentimientos que me hacen sentir renovado y remagnetizado. He recuperado mi sensibilidad espiritual a niveles donde he podido contactar con los espíritus de la naturaleza y seres de otras dimensiones. Así tal como lo leen.

En este estado, por fin he descubierto lo que es el verdadero poder del amor, una fuerza cósmica que está en abundancia por todas partes. Y esta fuerza creadora se impulsa desde la sexualidad, la unión entre nuestro masculino y femenino interior. Trabajar esta fuerza requiere una soberanía espiritual desarrollada. De lo contrario, no podrás sostenerla y se te dispersará por todos lados, pudiendo dejar estragos por todas partes. Esto es lo que pasa en la mayoría de las relaciones de pareja, amigos y familiares hoy en día.

De vuelta al mundo

Recientemente he estado volviendo al mundo de la materia. Dejando un poco este estado tan angélico y entrando nuevamente en un estado "sexual", que no necesariamente significa que estoy teniendo relaciones, de hecho no las he tenido, pero sí me estoy permitiendo a un nivel sutil preponderar mi energía masculina. Cuando entro en contacto con las demás personas, acepto entrar en esta dinámica de fluir con la energía masculina y femenina externalizada en las interacciones sociales.

Ha sido necesario, porque en mis objetivos actuales de la vida, esto es lo que me toca ahora. Sin embargo, entro al mundo con una nueva forma de sexualizar, mucho más consciente, en el dominio de mí mismo. Antes carecía totalmente de esto, era un esclavo de mis pasiones más bajas. Y sí, antes tenía mucha experiencia y todo, pero emocionalmente salía trasquilado a cada rato, tenía una vida bien desgraciada.

La cruda realidad: Para dominar el área del amor, tendremos que dominar también el área de la salud y el dinero

Este tema es extenso, pero primero necesitarás dominar la salud y luego el dinero. En paralelo puedes conseguir el amor, seguro que sí, pero lo más probable es que sea algo líquido.

He comprendido que una mínima estabilidad en las áreas maestras de la salud y el dinero son las bases para poder sostener el amor. La salud te llevará al estado óptimo de tus pensamientos, sentimientos, comportamientos y cuerpo físico. Y por otra parte, el dinero te llevará a tener una estructura de vida capaz de cumplir con responsabilidades, desarrollar talentos, un estilo de vida y una visión de nuestra relación con el mundo. Si no tienes un mínimo de esto, lograr el amor se nos hace demasiado cuesta arriba, casi imposible diría yo.

4 pilares del amor

Carácter: Un terreno más estable que la personalidad, aquí es donde podemos "moldear nuestro personaje". Cultivar rasgos y cualidades con plena consciencia para conseguir nuestra mejor versión. Aquí entra el desarrollo personal al máximo y sí, recomiendo el celibato un tiempo si quieres obtener un boost atómico en el desarrollo de tu carácter.

Vida amorosa: En este pilar desarrollamos nuestro rol como pareja. Lo primero es saber estar con nosotros mismos; el carácter nos ayudará mucho a eso. Luego, buscaremos externalizar esta polaridad masculina o femenina para que el otro haga el rol de complemento. Definitivamente, esto es un juego de roles, y debemos saber las reglas de este juego. Las dinámicas sociales son clave en este pilar.

Familia: La conformación de nuestra tribu es un pilar para la vida. Primero debemos armonizar lo que viene con nuestra familia de nacimiento y sanar cualquier disonancia con nuestro padre y nuestra madre. Luego, encontrar nuestro lugar. Puede ser formar una familia tradicional, pero en este tiempo creo que incluso un grupo de amigos tipo tribu podría funcionar como familia.

Vida social: El futuro es saber vivir en comunidad. Quien no sepa vivir en comunidad está acabado. El aislamiento, la soledad y la falta de interacción social indican un exceso de egoísmo. Sé que es difícil, yo amo pasar el tiempo a solas, pero es la comunidad la que te impulsa a vivir el altruismo. El mundo del futuro se destacará por ser altruista, eso está trazado en el Plan Divino y no hay cómo cambiarlo. Si estás solo, te animo a buscar tu tribu, encuentra tu lugar, y si no existe, entonces créalo y atrae a quienes vibran como tú.

Esto es una pequeña probadita de todo lo que podría hablar sobre este terreno del amor: la sexualidad consciente, el árbol genealógico, la creación de comunidades, el desarrollo personal, la nueva política basada en una Neo Aristocracia y una Neo Democracia, y tantas cosas más.

Estamos entrando en una nueva era del Amor, pero estamos en pañales tratando de entender qué es esto realmente. En los siguientes blogs estaré abordando cada uno de estos pilares en detalle. ¡Gracias por llegar hasta aquí!